Manu Royal solo graba temazos
Ferny Royal: nuestro veterano de las guerras pop
Stay tuned for more Rock&Roll!!!
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rock&wine (VI) |
Manu Royal solo graba temazos
Ferny Royal: nuestro veterano de las guerras pop
Stay tuned for more Rock&Roll!!!
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rock&wine (V) |
Manu Royal elige armas antes de entrar a grabar
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rock&wine (IV) |
Servidor rockeando en un robado/posado
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rock&wine (III) |
Mi Aranda natal no es una gran ciudad, pero tiene de todo
Por cierto, no os perdáis la crítica del Meister sobre el Sonorama. ¡Y comentadle, malditos!
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rock&wine (II) |
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rock&wine (I) |
¿Cómo poner en común el mundo del vino y el del rocanrrol (más allá del calimocho)? A primera vista parece complicado. Pues en Castrillo de la Vega, a 5mn de Aranda de Duero, lo han conseguido: Una bodega que también es un estudio de grabación. Desde este lunes The Royal Suite nos hemos metido en las bodegas Neo a grabar nuestro nuevo EP. A un lado de la nave, la cabina y los controles. Al otro, la cava con lo más selecto de esta firma de la Ribera del Duero. Y entre ambas, las barricas de roble francés. Para las zonas habitables una arquitectura de interiores muy moderna. Mucho diseño: pasillo de agua en la entrada, madera en el interior... Una cocina americana completamente equipada y la oficina de la bodega, pared con pared... ¡de cristal! Y toda la decoración llena de elementos que ponen en común ambas culturas. Puro Rock&Wine, gente. No en balde uno de los socios de las bodegas es el organizador del Sonorama. Podéis encontrar más información aquí sobre esta curiosa fusión.
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ostras o mortadela (VII). el show business |
Siempre he ido bastante justo de dinero, independientemente de mi actividad laboral. En la actualidad he aprendido a sobrevivir de la hostelería eventual en Valladolid, pero ha habido momentos en los que iba más holgado. El problema con las orquestas no era cuánto (que también; la época dorada para los músicos de verbena fueron los ochenta), sino cuándo. Atrás quedaron los momentos en los que tenía que abandonar un piso de alquiler porque un jefe llevaba tres meses sin pagarme, pero viéndolo en perspectiva la cosa no deja de tener su gracia.
El tío que más pero peor me ha pagado nunca fue un personaje bastante interesante. Su relación con el dinero era muy punk, es decir “no future”. Era capaz de estirarse y alquilar un chalé con piscina para alojarnos durante las actuaciones de las Fallas sin saber cuándo cobraría el siguiente bolo. En una ocasión llegó a afirmarme que, debiéndome un par de meses de sueldo, aún no podía pagarme los cuatro duros que me faltaban para que no me dejaran en la calle, y acto seguido meterse en el baño a, muy probablemente, enchufarse una loncha. Para un empresario es una actitud muy Carpe Diem que, de alguna morbosa y retorcida manera, admiro profundamente. Suyas son auténticas joyas del absurdo, como iniciar una relación con una de las bailarinas cuando su mujer era otra de ellas y, teniendo deudas millonarias (con sus empleados entre otros acreedores), pagarle a su amante una espectacular operación de aumento de pecho. El comentario de alguno de los músicos, con una sonrisa amarga en la cara, no se hizo esperar.
-Bueno, ya que esas tetas se han pagado con mi dinero, tendré que pedir hacer uso de ellas hasta que se salde la deuda.
Estas situaciones irregulares con la pasta son insignificantes comparadas con las que se viven en Galicia, donde el negocio de las orquestas es el método tradicional de blanqueo de dinero de la coca. Empresarios, mafiosos y concejales han hecho posible que en concellos de doscientos habitantes se den cita el mismo día tres orquestas con un equipo mayor que el de los Rolling Stones. Las historias de millones en deudas que aparecen milagrosamente tras la visita de unos sicarios a la casa de un empresario de espectáculos son cosa de todos los días. Un buen tema para un periodista de investigación. Pero gracias a esta cultura, Galicia cuenta con una de sus especies autóctonas más representativas e interesantes: el cantante de orquesta gallega, del que escribiré en otra ocasión.