gente que arde por dentro
Algunos ya sabréis que, aprovechando que los músicos con los
que toco no están precisando de mis servicios tanto como antes, estoy montando
una banda propia. Sí, a estas alturas. A mi edad.
A veces me pregunto qué cojones pretendo poniéndome a
componer ahora, cuando nunca antes lo había hecho, más allá de arreglarles
canciones a otros. Veo cómo las viejas discusiones sobre técnica, estilos y
formatos siguen ahí, como cuando empecé hace casi veinte años. Veo que he
abandonado definitivamente algunos caminos, pero de entre todas las cosas que
querría hacer ni siquiera tengo claro por dónde sí tirar.
Así que me he parado a pensar. ¿Qué pretendo realmente con
esto? ¿Qué quiero transmitir? ¿Y a quién? La respuesta es muy sencilla, y la
misma que siempre me trae a escribir aquí cuando no encuentro manera o
interlocutor de sacarme esta esquirla incandescente que intento constantemente
compartir con vosotros: A mí lo que de verdad me interesa es la gente que arde
por dentro. La gente que no puede evitar consumirse en lo que son, aunque eso
les lleve a la ruina física o moral. La gente que es capaz de llorar de rabia,
desnudarse sin el salvavidas de la confianza o viajar miles de kilómetros por
una promesa hecha bajo los efectos de la nocturnidad. La gente sin medida ni pudor.
La gente que está realmente viva.
Si consigo, en algún breve momento, formar parte de la banda
sonora de una sola de esas personas, habré conseguido lo que quiero.
commentaires:
7 de marzo de 2014, 3:38
Sr. Cordero, adelante con todo. Así nos abrasemos.
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