12/2/07

Un poco de espontaneidad, para variar


Tenía preparada una entrada sobre algunos aspectos de Lille en profundidad, pero en este momento llevo un turcio bastante serio y me gustaría compatirlo con vosotros. Al fin y al cabo ¿Que aporta un blog que no tenga la escritura a la vieja usanza? Que puede ser leída a tiempo real. Que tiene algo de inmediatez que permite leer a alguien que escribe borracho antes de que se eche a dormir y pierda ese momento de lucidez alcohólica. Hay a quien le da por ponerse triste, o violento, o pesado con las chicas cuando se ha tomado unas copas. Yo me he tomado un par de botellas de burdeos bien acompañado, y ahora que ella duerme pues me da por contároslo. Antes me daba por tocar. Ahora todos tenemos un blog. He de reconocer que me siento un poco Hemingway, en una buhardilla del norte de Francia con unos vinos de más, a pesar de que no aguanto al puto Hemingway. Si no fuera tan hipocondriaco me metería un buen chute de morfina para sentirme más Baudelaire que otra cosa. Pero aquí estoy, sintiéndome yo y sintiéndome bien. Sin un puto duro, sin saber donde estaré el mes que viene, pero aquí estoy, gozando de la vida, del vino, de la música, del francés, del escribir, de vosotros... Más allá de lo que hubiese esperado de un gilipollas hiperresponsable y preocupado como yo, y aún a riesgo de que esto parezca otra mierda de blog onanista y autocomplaciente. Me la suda. Estoy fumándome una shisha estupenda, escuchando al puto Hendrix y quiero compartirlo con vosotros, porque en el fondo sabréis identificaros con lo que siento, y quiero que lo sintáis conmigo. Brindo por vosotros.

2 commentaires:

Me encanta. Me parece muy bonito que quieras compartir esos momentos con nosostros, que estamos tan lejos y, que, al mismo tiempo, te hemos rondado esta noche por lo más íntimo. No te preocupes, ya sabes que "se hace camino al andar". Gracias por esta especie de brindis en el espacio, ¿te acuerdas?

¡Ay! Alex que se nos desmelena y se nos transforma en bohemio.. (bueno, ¿no lo has sido siempre?)
Qué pena no estar contigo para compartir el vinillo y contarnos historias de walkirias-sirenas (aunque nunca hemos necesitado del vino para desvariar) y mandar al futuro a tomar por el orto... ¿A quién pretende engañar? Si está claro que no existe: ¡a vivir el momento! sobre todo los buenos momentos.