retablos
La semana pasada tuve ocasión de entregar por fin el premio del concurso navideño. La afortunada agraciada, Esther, se llevó este magnífico cartel, firmado y dedicado, de la primera orquesta en la que trabajé. Observen qué fantástico retablo:
El diseño de esta absoluta genialidad de marketing y culmen del mal gusto es responsabilidad de nuestro por aquel entonces jefe. Qué absoluto lo que sea (porque esto no tiene nombre). ¿Qué me decís de ese rótulo, "Musical Galilea", donde debiera poner "Heraclio Fournier"? La brillantez de colocar la foto en el lugar de la jeta del as de oros no tiene precio. Mus y verbena en el mismo concepto, como tiene que ser. ¡Órdago a grande!
Pero si pensáis que con esto ya lo habíais visto todo en cuanto a frikez, pasaros por aquí a ver el post que me ha dedicado un compañero de clase. Comprobaréis que, si algo nos enseñan en periodismo, es a titular con dos cojones.
10 commentaires:
30 de enero de 2008, 21:59
Por cierto, yo era el melenas perilludo de la derecha. (Disculpad la mala calidad de la foto).
Enhorabuena Esther! Un beso! A ver si nos pegamos más paliques de esos en el bar (o en cualquier otra parte)!
30 de enero de 2008, 23:14
La parte de abajo del cartel es cojonuda. Los músicos trajeados por un lado y el galán de pie con las tías sentadas por otro. Y las dos fotos puestas encima del Galilea original del que solo se puede leer LIL. NIN Y LIL, música para el terror.
31 de enero de 2008, 10:35
Que calidad! Y yo que pensaba que la orquesta Tucan era lo mas chungo que habia visto nunca.
Por cierto que versiones tocabais al final de los bolos? I mean, la mayoria de las orquestas chungs suelen tener entre sus filas grandes musicos. Yo he visto terminar conciertos de orquestas con Joe Satriani o Metallica.
Y los abuelos del pueblo encantados!
31 de enero de 2008, 14:43
El señor Terreiro hila fino... muy buen ojo!
Con respecto a lo que nosotros llamábamos el "pase de caña", Portrait, yo soy bastante más gañán a la guitarra. Mucho rock español. En la última en la que estuve, el "Higway to Hell". Pero en esta del cartel llevávamos (tocado por tres tíos:guitarra, bajista/cantante y batería) un popurrí de Barón Rojo de doce minutazos que es mi orgullo de orquestero. Nunca más volví a repetir nada semejante. Más largo sí (25 mn del tirón, en alguna ocasión), pero nunca tan auténtico.
"Vas sin afeitar, dice el sheriff del lugar, y además con tías buenas". Barón Rojo. Un grandísimo grupo a redescubrir.
31 de enero de 2008, 22:50
Gracias. Quiero darle las gracias al cordero por haber confiado en mí al otorgarme este premio.Y quiero dedicárselo a mi madre, sin ella nada de esto hubiera sido posible.
Jajajaja...
Habrá que repetirlo sí...quizá la semana que viene. Estamos en contacto.
besín
3 de febrero de 2008, 19:43
Impagable.. mis retinas no volverán a ser las mismas!
Qué jartá a reir me he pegado!
Salud compadre
4 de febrero de 2008, 17:10
Impresionante!
¿No habeis sacado 'cassettes' para las gasolineras?
:-P
Aupa! Que queda poco para el viernes!
4 de febrero de 2008, 17:11
4 de febrero de 2008, 20:11
Joder, pues casettes no, pero había discos! Como lo oyes!
Abrazos mil (gratis)!
6 de febrero de 2008, 1:16
Ese cartel es una joya de coleccionista. Deberías recoger tu víbora y sacarlo a subasta. Saludos de centenaria. Qué leches, abrazote que has dado, nuevamente, en el clavo con tu poligamo post. Voy pá allá.
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