9/9/08

el camino del hombre recto (IV). high noon

Anteayer tuvo lugar el juicio contra el crío que me atracó hace un par de meses. Como no las tengo todas conmigo sobre si legalmente puedo contar lo que sucedió en la vista, me perderé la ocasión de escribir una muy buena entrada sobre el que ahora ya sé que es el peor trabajo del mundo: abogado de oficio. Pero, cuando ya pensaba que no habría nada más que poder publicar sobre este asunto, ayer me sucede lo siguiente.

Salgo de casa camino de un ensayo con The Royal Suite. Me detengo en el cajero a sacar dinero. Un tipo gordo, calvo y muy mal vestido, con pinta de tener más o menos mi edad pero muy mal llevada está delante de mí. Al verme esperando parece ponerse nervioso. Se tira un buen rato delante del monitor sin hacer nada.

-¿Vas a utilizar el cajero?- le pregunto, viendo que ya llego tarde.
-Sí, voy a utilizarlo.- Segundos después se da la vuelta y me dice
-¿Tú duermes bien por las noches?
-¿?¿Perdona?
-Que si duermes bien por las noches.

Su aspecto desmejorado, su actitud apocada y balbuceante y esta pregunta absurda me hacen pensar que quizá se trata de un deficiente mental y empiezo a sentirme un poco mal por haberle metido prisa. Le respondo.

-Sí, muy bien.
-Pues no sé cómo puedes dormir bien después de haber metido en la cárcel a un chaval de dieciocho años.- Y pasando apresurado a mi lado se alejó.

El sentido de alerta es algo absolutamente asombroso. Tiene vida propia dentro de nosotros. Sentí cómo lo más animal de mí descartaba a este individuo como una fuente de peligro. De repente dejó de existir. Me salieron unos ojos en la nuca. Evalué en segundos la actitud de las cerca de treinta personas en la plaza buscando una amenaza para descartarla. El universo parecía discurrir a cámara lenta. Me acerqué al cajero y saqué el dinero, con un chute mezcla de absoluta vigilia e intensa calma. Me dí la vuelta y seguí mi camino.

Desde entonces he tenido tiempo para pensar de todo: Casualidad, me siguieron tras el juicio, si quisieran hacerme algo ya me lo habrían hecho, no he debido dejarme este bigote y estas pintas tan reconocibles en una capital de provincias... Desde que el chaval de dieciocho años me atracó, Valladolid era para mí un poco más la jungla que antes. Un lugar en el que poner en practica someramente lo que aprendí en ese territorio (este sí) verdaderamente hostil que era mi barrio en Lille. Pero después de esto me sentí un poco Will Kane por cumplir lo que considero mi deber como ciudadano, lo cual no deja de tener cierto encanto. Lo más sorprendente es que ni mi vieja conocida ansiedad ni el miedo en sí han aparecido en ningún momento en escena. Solamente una extraña sensación, esa misma noche mientras me invitaban a una copa en un sitio muy elegante, de semialerta contínua que me ha hecho comprender por fin porqué los que viven con una espada de Damocles necesitan placeres más intensos, caros o sórdidos para relajarse y disfrutar de la vida: Porque sin esas cosas y en ese estado, la vida debe ser una puta mierda. Ostras con mortadela. No envidio a los mafiosos multimillonarios, os lo aseguro. Por si acaso, y para despistar más a mi demonio de la paranoia que a un enemigo real, anoche dormí en mi nuevo piso con mis nuevos compañeros.

Y dormí de puta madre, oye.

10 commentaires:

"no he debido dejarme este bigote y estas pintas tan reconocibles en una capital de provincias..."

Pues yo te vi de lo más chic el otro día ;-)

Salut!

Hola domi! Lo digo porque llamar la atención tiene partes positivas y negativas. Una de las negativas es ésta.

Jurl, que sórdidez y que tensión!! Ánimo tío!!

Me ha dicho tu supremo que le pareces a Pancho Villa con tus nuevas pintas. Y yo sin verte. Comemos en las casetas el finde? Estoy de tarde. L.Q.T.P

Gracias Milgrom! Aunque cosas como ésta te enseñan a vigilar tu culo.

Acepto gustoso la invitación madre, aunque he de advertir que me he cansado pronto del bigote de guardia civil de domingo y ha caído esta mañana.

Oye, ¿y en serio que a ese chaval le han metido en la cárcel por aquel episodio? Un robo con intimidación así suelto no da para tanto, ¿no?

En fin, me encanta esa gente que prefiere pensar que la culpa es de la gente que denuncia más que de tu chaval que se mete en líos. Otra cosa es que el sistema sea una mierda y a todos estos raterillos les pillen y a los que estafan millones casi nunca.

A mí la vez más fuerte de las que me han atracado me atacaron por detrás y me pusieron un cuhcillo jamonero en el cuello hasta tirarme al suelo. Y, lo que son las cosas, me dio la risa floja...

diosss q adrenalina !!!

ciertamente la gente q vive en riesgo constante
puede q necesite "placeres intensos, caros o sordidos"...
(que bien descriptos, oiga)

pero y si nos gustan esas cosas xq si??

Siempre que me paso por aquí me encuentro con cosas de lo más interesantes... ¡Qué crack!

Pd.- A mi me parece que has echo lo correcto, ¡oye!. Tenga 16, 18 o 40 años ha delinquido, ¿no?. Ahora va a ser que debemos esperar a que mate a alguien para meterlo en la cárcel... Y cuando lo haga, nos quejaremos porque años atrás la justicia se quedó de brazos cruzados mientras el chaval se dedicaba a dar el palo a la gente. Si es que no hay quién nos entienda.

Yo también tuve un episodio parecido hace años,y mira,te puedo asegurar que no acaban en la cárcel...ýa te lo contaré el próximo día que nos tomemos unas cerves en el borsa,tronco. He estado un mes sin intené, me acabo de meter en tu blog y la historia me ha resultado familiar: está claro que siempre sale perdiendo el que denuncia este tipo de cosas

¿Porque piensas que te reconocieron o te siguieron cuando el juicio, porque no puede ser alguien de los que leen este y otros blogs? En la red esta representada tada la sociedad y hay gente par todo...