19/11/10

la casa a cuestas

Entre las cosas que siempre llevo encima está mi cepillo de dientes porque, como todo el mundo sabe, allí donde esté tu cepillo de dientes está tu hogar. Es una costumbre que adquirí cuando tocaba con la orquesta, en una época en la que nunca sabía exactamente dónde dormiría esa noche (mañana más bien), dónde comería, me lavaría o incluso cuando sería la próxima vez que podría hacer alguna de esas cosas. Era una vida en la carretera en toda regla, que me enseñó que, cuando careces de rutinas y seguridades en la vida, un cepillo de dientes puede ser lo único que necesitas para sentirte en casa. Un hogar de perfil bajo que puedes llevar siempre contigo, sean cuales sean tus circunstancias.

Desde hace unos días he añadido al kit básico de supervivencia un bote de gel de ducha porque me han cortado el gas. Hasta que se resuelva, la Niña Fatal y yo andamos mendigando una ducha, principalmente en casa de sus padres. En la de los míos también he recalado en algún momento. Pero cuando tu agenda te obliga a ducharte en casa de una compañera de clase (y amiga) o le tienes que decir a tus amigos del centro que preparen una toalla de más por si acaso, la cosa adquiere un tono un tanto outsider. Ayer, desnudo bajo un chorro de agua caliente en un plato de ducha extraño, rodeado de productos de higiene de gente a la que no conocía, me dí cuenta de lo frágil que es nuestro concepto del hogar. Y me reafirmé en la idea de que deberíamos estar siempre preparados para perder. Mantener bajas las expectativas para no estar puteados cuando lo que pensamos que son nuestras vidas se vaya a la mierda. Dejar listo nuestro funeral si vamos a viajar a un país con riesgo de amenaza terrorista.

Manteniendo una actitud de supervivencia dejaremos de sentirnos desnudos y podremos, cuando por fin vuelvan a conectarnos el gas, disfrutar de los milagro diarios que de otro modo daríamos por hechos.

10 commentaires:

¡Mi reino por una ducha!

de dejar pagado el entierro nada...que nos coman los buitres en la plaza mayor del pueblo. eso o al vertedero, pero gastarse esa pasta en otra cosa más interesante.
m

Señor M, hablo de dejar listos tus asuntos y encargarte de montar una fiesta de despedida para tus allegados. Y el entierro verde es mi opción no ya sólo por cuestiones ecológicas, sino porque es mucho más barato.

nada...insisto, buitres en la plaza mayor, no nos encargamos en vida, ocmo para hacerlo por otros.

en fin, en otro orden de cosas, digame usted donde toca el 11, que tengo una buena amiga en murcia y le comentaré que se pase, y si se pasa...que le salude.

m

Mi cepillo de dientes es su música. Música de gente tan genial como usted es lo que hace que me sienta en casa por más que viva a 4000 km de mi hogar y tenga los pies enterrados en nieve :)

Apuntaos a u gimnasio. Es la solución al tema de la ducha y vuestra puesta en forma. Todo suma!

Hola, muy interesante el post, felicitaciones desde Argentina!

Este comentario ha sido eliminado por el autor.

Digo que lo que mola fisgar entre los cosméticos ajenos, y probar geles de ducha nuevos.

¡Caballera! ¿Qué tal va ese bollo que tiene en el horno?